Introducción al jainismo: las dos sectas

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El jainismo, como la mayoría de las religiones, tiene sectas o distintas corrientes. Las dos principales son ‘Swetambara’ o ‘vestidos de blanco’ y ‘Digambara’ o ‘vestidos del cielo’ o desnudos.

Los hombres ‘Digambara’ no llevan ropa y van desnudos, ya que practican el no apego al cuerpo. Comen estando de pie en un sitio y no utilizan ningún recipiente. Comen solamente una vez al día.
Llos monjes y las monjas ‘Swetambara’ se visten de blanco. Llevan la ropa sin coser, mostrando que no hay apego hacia ella.

Jainista

Foto: Álvaro Maldonado, Sociedad Geográfica de las Indias

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Introducción al jainismo: principales creencias

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Intentaremos recoger la compleja cosmología de códigos morales, doctrina y creencias que conforman la religión jainista, repleta de categorías, nombres y grados.
Básicamente, podríamos definirla por ser:
No-teísta: no existe una divinidad única. Consideran que el mundo es eterno y carece de principio. De la misma forma, todas las posibles divinidades (en la naturaleza, por ejemplo) no son emanación ni manifestación de ninguna divinidad sino que son divinidades por sí mismas, por así decirlo.
Pananimista: toda la realidad es vida. El universo es una totalidad viviente; todo ser posee un alma más o menos compleja. Por eso, el mayor pecado para el jainismo es causar daño a un ser vivo, aunque también hay que evitar dañar a la tierra o a las almas del agua o del aire. De ahí su afán por la no violencia y sus estrictas costumbres vegetarianas.

Detalle del templo de Ranakpur

Foto: Álvaro Maldonado, Sociedad Geográfica de las Indias

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Introducción al jainismo

 

Templo de Ranakpur

 

De las religiones principales en India, los jainistas conforman en torno a un 0,5% de la población india, lo que significa cerca de 5 millones de personas.
Destaca por ser una religión no-teísta, lo que significa que no aceptan los Vedas hindúes como verdad, aunque se suele traducir como que no creen en un dios.
Su concepción del mundo y el universo es la de algo eterno, inalcanzable a nuestra comprensión. Toda la realidad es “divina”, cualquier fenómeno natural, cualquier animal, insecto o planta son dignos de devoción. Para un jainista es pecado causar daño a un ser vivo o a la naturaleza. Son vegetarianos estrictos y fieles defensores de la no violencia; también buscan un constante desapego por lo material, como forma de descargar su alma en futuras reencarnaciones.
Hay dos movimientos jainistas principales, los Svetambaras siempre llevan ropas ligeras y blancas y los Digambaras, que suelen ir desnudos o semi desnudos.

Su filosofía y práctica se basan principalmente en el esfuerzo propio para el progreso del alma hacia la consciencia divina. Cualquier alma que vence a sus propios enemigos internos y logra el estado perfecto se llama ‘Jina’ o ‘el conquistador’.

Los jainistas tienen veinticuatro profetas, llamados los ‘Trithankaras’ (que se traduce como ‘el que muestra el camino’).
El primero sería Adinath (siglo IX antes de cristo) y el último y más conocido es Mahavira (siglo VI antes de cristo), contemporáneo de Buda.

Actualmente los jainistas forman una comunidad importante en la India aunque en minoría. Son reconocidos como muy buenos comerciantes y tienen bastante presencia en Norteamérica, Europa occidental, Australia y en otros lugares.

Continúa:
Principales creencias jainistas.
Las dos principales corrientes jainistas.


Sobre el autor:
AmarjeetAmarjeet Singh es Coordinador de viaje y guía personal para Sociedad Geográfica de las Indias. Licenciado en Filología Hispánica, es amante de España y la cultura hispánica y un gran humanista interesado en el encuentro entre culturas. Para más información: [Quiénes somos]

Introducción al sikhismo: 10 gurús (Teg Bahadur, Gobind Singh)

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9. GURU TEG BAHADUR ( 1621- 1675)
Fueron años difíciles, sobre todo para el hinduismo. Aurangzeb, conocido como el emperador fanático, quería hacer de India un país islámico. Ordenó destruir templos hinduistas y fueron contruídas mezquitas en su lugar. Incluso retomó la ‘Jazia’ o ‘el impuesto religioso sobre los no-musulmanes’.
Un día, un grupo de hinduistas visitó al Gurú (sikh) y le pidieron protección contra la politica religiosa del emperador. Guru Teg Bahadur se presentó como voluntario y escribió una carta al emperador y le dijo que si podía convertirle a él al islam, lo harían todos los demás.
Aurangzeb lo tomó como un reto y encarceló al Gurú en Delhi, junto con otros tres sikhs influyentes. Debían elegir entre aceptar la muerte o el islam. Los tres elegieron la muerte.
El primero fue hervido vivo en agua, el segundo fue cortado en vertical con una sierra y el tercero fue quemado vivo. El Guru fue decapitado.
Ya antes había declarado que su único hijo, Gobind Rai, sería el sucesor.

10. GURU GOBIND SINGH(1666-1708)

El último Guru humano de los sikhs, Gobind Singh resultó ser un buen líder. Él reorganizó a la comunidad e hizo muchos cambios importantes y decisivos. A pesar de largos períodos de guerras y exilio, tuvo tiempo para escribir importantes escrituras y también de hacer la recopilación final del libro ‘Adi Granth’, incluyendo en él los versos de su padre.
Se decidió que el sikhismo debía continuar sin depender de un Gurú cada vez, lo que les hacía más vulnerables. El Gurú permanente sería ahora y para siempre el Libro Sagrado.
El día 14 Abril, 1699 organizó el ‘Bautismo de la espada’. Hasta entonces, el agua para bautizar a la gente se preparaba lavando los pies del Gurú. Pero como no iban a haber más Gurús, no se podia continuar con esta costumbre.
También propuso ciertas normas para la posteridad. Elegió el apellido común ‘Singh’ para los sikhs varones y ‘Kaur’ para las mujeres. ‘Singh’ y ‘Kaur’ significan «león» y «princesa», respectivamente. Así cambió su nombre de Gobind Rai a Gobind Singh.

A partir de entonces, cada sikh bautizado debe de llevar siempre los cinco símbolos, llamados las cinco ‘k’. Son :
– ‘kesh’, es decir, el pelo sin cortar,
– ‘kanga’, un peine de madera,
-‘kirpan’, una daga, que simboliza poder y libertad de espíritu, autorrespeto, la lucha constante del bien y la moralidad sobre la injusticia,
– ‘kara’, un brazalete de acero, y
– ‘kach’, unos calzoncillos tipo bermuda.
Además se les prohibe beber alcohol y fumar, y deben ser vegetarianos. Podríamos decir que los dos pecados más graves que pueda cometer un sikh es cortarse el pelo y fumar.
Antes de su muerte declaró que no habrá más Gurús humanos y que el Libro Sagrado ‘Guru Granth Sahib’ sería el último y permanente Gurú.

Libro sagrado sikh

Actualmente, para los sikhs el Libro es como el cuerpo de los Gurús y los versos que contiene son las Palabras de los Gurús. Todos los templos sikhs tienen un ejemplar del Libro Sagrado, aunque el original se conserva en el Templo Dorado de Amritsar.
Una lectura continua del Libro dura 2 días.

Las palabras con que empieza el Libro son:

Hay un Dios,
es Verdadero,
es el Creador,
está impregnado en Su Creación,
es intrépido,
es sin miedo,
es Inmortal,
no nace y no muere,
es autocreado,
es el Guru,
es la Gracia,
siempre ha sido verdadero,
lo ha sido durante las edades
y siempre lo será.

Recordemos por último los tres pilares del sikhismo:
– honrar y recordar a Dios,
– ganarse la vida trabajando honradamente,
– compartir con los demás.

Introducción al sikhismo: los 10 gurús (Ramdas, Arjan Dev)

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4. GURU RAMDAS (1534-1581)

Guru Ramdas destacó por su contribución para que el sikhismo tuviera su propia identidad. Hasta entonces, los sikhs todavía visitaban los centros sagrados del hinduísmo para la peregrinación. Ramdas comprendió que los sikhs deben tener su propios lugares donde reunirse para motivos religiosos. Mostrando una gran visión del futuro, quería que los centros religiosos fueran también lugares de intercambio comercial.
Ramdas fundó varias ciudades y animó a los sikhs para establecerse en éllas. La ciudad más importante fundada por él es la actual ciudad de Amritsar, donde se encuentra el mundialmente famoso ‘Templo Dorado’. El Guru, para construir la ciudad, mandó perforar el lago que allí había y le puso el nombre de ‘Amritsar’ o «el lago de Néctar». El agua fue consagrada y el Guru declaró que un baño en este lago significaría el mismo mérito que bañarse en los ’68 lugares sagrados’ de la religión hindú.
Guru Ramdas nombró a su hijo menor, Arjan Dev, como el sucesor, rechazando a sus dos hijos mayores y dejando claro, una vez más, que no había cuestiones jerárquicas a la hora de nombrar sucesor.

Templo Dorado de Amritsar

Foto: "Gps1", en Flickr

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Introducción al sikhismo: los 10 gurús (Angad, Amardas)

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2. GURU ANGAD (1504-1552)

Bhai  Lehna  era el discípulo favorito de Nanak y el más fiel a sus enseñanzas. Fue elegido el próximo Guru después de unas pruebas de obediencia y fe completa en el maestro. Recibió el nombre Angad.
Guru Angad enseñó a los sikhs los valores de la obediencia y a tener fe en el verdadero gurú. Era un amante del ejercicio físico, por lo que también organizaba combates de lucha libre para, entre otras cosas, otorgarle valor a la salud física. Quizás también preparando a los sikhs para la segunda etapa de la historia, la etapa de las batallas.Otra contribución importante de Guru Angad era la de la creación de una nueva escritura para la comunidad sikh. En el hinduísmo había un problema: las escrituras sagradas estaban escritas en sáncrito, un idioma que las masas no entendían y dependían de la clase sacerdotal para su interpretación. Los brahmanes se aprovechaban así de su prestigio y mantenían su status por estos privilegios. Guru Angad se decidió por recoger unas escrituras que todo el mundo pudiera comprender e interpretar. El idioma sería (y es) el punjabi y la escritura se llama ‘gurmuji’ o ‘originado de la boca del Guru’.

El sistema de nombrar al sucesor espiritual no era jerárquico; la edad tampoco era importante. Así que el tercer maestro, Guru Amardas era mayor que Guru Angad. También era uno de sus seguidores más fieles.

Mujer sikh

Foto: Álvaro Maldonado, Sociedad Geográfica de las Indias

3. GURU AMARDAS (1479-1574)

También es conocido como ‘el Guru anciano’ porque tenía unos 75 años cuando se sentó en el asiento del Guru. Antes de eso, mostró servicio desinteresado al segundo Guru, permaneciendo a su servicio unos 15 años. Su tarea consistía en caminar unas 5 millas cada día con un cántaro para buscar agua para el baño y la limpieza diaria del Guru. Se dice que no falló ningún día.
En los 20 años que estuvo como Guru, hizo muchas reformas sociales sobre todo los derechos de las mujeres. Por ejemplo, prohibió la práctica de la ‘burka’ y el velo. También levantó su voz contra la práctica de ‘sati’ o la viudas que se quemaban en la pira funeraria del marido.

Según aumentaba la popularidad de esta nueva religión, la ortodoxía musulmana empezó a ver una amenaza. Por otro lado, muchos de los brahmanes hindúes también rechazaban a los gurus sikhs. Los ulemas (estudiantes y seguidores de la ley islámica) se quejaron al emperador mogol, Akbar, acusando a las enseñanzas de los gurús sikhs de contener llamados contra el Islam. El emperador Akbar, conocido en la historia como un gran humanista, investigó el asunto y encontró que la acusación era falsa.

Entre los seguidores más queridos del Guru había un jóven huérfano que desde pequeño vivía con él. Más tarde, Guru Amardas le hizo su yerno y cuando llegó el momento le nombró su sucesor, pasando a ser el cuarto gurú: Guru Ramdas.

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