Escrito por: Javier Galán
Viajar a Sarnath significa regalarse un recorrido arqueológico impresionante. Sarnath es uno de los cuatro sitios sagrados de peregrinación de referencia para los budistas, donde Buda entonó su primer sermón.
Todo sobre viajes a India: los destinos a visitar, cuándo es mejor viajar a India, los monumentos más importantes y las actividades que no te puedes perder en este país, que cuenta con uno de los mayores legados históricos del planeta.
Te contamos las últimas novedades de los hoteles de lujo en India así como los servicios exclusivos que podrás encontrar en ellos. Recorremos India de norte a sur para conocer de la mano de nuestros expertos en destino India los monumentos, itinerarios y festivos imprescindibles para disfrutar de un viaje a India con guía en español. Además, toda la información sobre el clima en India, los mejores restaurantes del subcontinente indio, contenidos prácticos sobre la vida cotidiana en India… la sección de Viajes India está abierta también a los artículos, opiniones y fotografías que envían los clientes que han confiado en Sociedad Geográfica de las Indias para organizar su viaje a medida a India. Por último, recopilamos toda la información divulgativa que nuestros colaboradores han escrito sobre la historia de India, los animales de India, el deporte en India y en general todas las experiencias en el subcontinente indio que se ofrecen al organizar un viaje a medida con una agencia especializada.
Escrito por: Enric Donate
09.00 Tienes por delante 24 horas en Madurai y empiezas por un desayuno indio copioso para que no falten las fuerzas. A las 9 sal del hotel hacia el Thirumalai Nayak Mahal. El palacio de los reyes de Madurai conserva solo un cuarto de su extensión donde se mezclan la arquitectura dravídica del sur de India con claras influencias islámicas. La columnata del patio y los labrados de las columnas dan una idea de la grandeza de antaño. Especialmente conocida es la Sala de Baile que se ha convertido hoy en un pequeño museo.
A continuación, dirígete al Templo de Meenakshi. Los coloristas gopuram o torres que marcan las entradas al recinto sagrado son la antesala de uno de los templos más extensos y sagrados del hinduismo. Con varios siglos a sus espaldas, el principal templo de Madurai es una muestra viva de la arquitectura dravídica. Shiva y su esposa Meenakshi son venerados por miles de peregrinos cada día. El espacio del templo parece infinito. La Sala de los Mil Pilares te absorberá al ritmo de los mantras recitados sin cesar por la megafonía. Te recomendamos que te dejes llevar.
13:00 Hacia la 1 de la tarde es hora de salir del templo, especialmente si te apetece merodear por el mercado de tejidos de la ciudad. Madurai es un importante centro del comercio de sedas y sus sastres son famosos por elaborar ropa en pocas horas con los tejidos más suntuosos. Si te pica el gusanillo, lo mejor es dirigirte al hotel, donde al almuerzo le pueden seguir una breve siesta o un chapuzón en la piscina para combatir el calor.
17:00 Por la tarde, el Museo de Gandhi no es solo una oportunidad única para conocer la vida del líder político y espiritual indio, sino que de 5 a 6 realiza una clase de introducción al yoga. Aprovecha las instalaciones de este bungaló colonial para perfeccionar tu yoga o tener tu primer contacto con esta práctica ancestral india.
19:00 Hacia las 7 de la tarde deberás volver al Templo de Meenakshi donde se celebra el famoso aarti. En esta ceremonia que cierra el sancta sanctórum del templo, el dios Shiva es llevado en palanquín a la cámara de Meenakshi donde pasarán juntos toda la noche. La pompa de la procesión de los brahmanes no tiene parangón. Al abandonar el templo, sentirás que el día ha sido muy intenso. Sin embargo, si todavía tienes energía, puedes cenar en Bell, un verdadero patio de comidas del Sur de India donde te sentirás como un local.
Escrito por: Javier Galán
Parecen esponjosas como pastelitos de crema pero miden varios metros y se extienden a lo largo y ancho de un terreno generoso. Son las cúpulas que coronan los más de 250 cenotafios de los marajás de Mewar a los que se recuerda en Ahar, a unos escasos dos kilómetros de Udaipur en dirección este.
Quizá conviene una pequeña explicación: un cenotafio es un monumento funerario levantado para recordar a un difunto, pero sus restos mortales no descansan dentro, como ocurre con los mausoleos, por ejemplo. Los cenotafios de Ahar, de hecho, podrían pasar perfectamente por mausoleos, hasta que nos enteramos de la historia: el lugar en el que ahora se levantan fue el mismo en el que se incineraron los cuerpos de 19 marajás del reino de Mewar. Se les recuerda, por lo tanto, con estas estructuras con forma de chhatri, tan extendida en India.
Los muros de esta necrópolis se alzan en un lugar alejado del circuito turístico más manido de Udaipur. Se trata de Ahar, una zona que se encuentra entre el centro turístico y la universidad de la ciudad, muy cerca de uno de los pequeños ríos que atraviesan la ciudad, el Ayad, y que recoge las aguas sobrantes de los famosos lagos Pichola y Fateh Sagar, cuna de las islas y los monumentos más visitados de la ciudad. Siguiendo el cauce del río desde ellos llegaremos a este pequeño tesoro calmo en el que es probable que nos encontremos solos, pues no cuenta ni de lejos con la atención del resto de las atracciones de Udaipur.
Existe una evidente uniformidad entre los cenotafios. Todos se presentan alzados. A muchos, sobre todo los más grandes, se llega subiendo una decena o varias de escalones blancos, negros o grises, dependiendo de las suertes que corrieron. Y arriba se encuentran las murallas que sostienen las referidas cúpulas, que crean figuras poligonales de tranquilidad y cuyo número depende de lo grande que sea la cúpula a erguir, llegando hasta los cincuenta y seis de la más importante.
Cierto es que los cenotafios de Ahar se quedan lejos de cementerios enigmáticos de inspiración francesa o de aquellos otros que no son otra cosa que luchas de suntuosidad entre los vivos. El crecimiento de Udaipur lo ha engullido entre sus edificios, pero un paseo entre estos sepulcros de la antigua sociedad pudiente de los Mewar relaja más que informa. Se construyeron a lo largo de tres siglos, aunque han sido restaurados en los últimos tiempos. Los carteles informativos brillan por su ausencia más allá de las tumbas más importantes, por lo que resulta conveniente tener una fuente alternativa de información. como un guía acompañante en castellano.
Al lado, sin embargo, se encuentra un museo que pretende preservar y mostrar, quizá con bastantes carencias, los restos encontrados de la antigua capital de la dinastía Sisodia, de la que se sabe que se desarrolló en los alrededores. La antigüedad de las cerámicas allí exhibidas permite reflexionar sobre la volatilidad de todo lo que consiguieron nuestros antepasados.
Escrito por: Enric Donate
Escrito por: Lorena Pérez
Todos estamos acostumbrados a ver la típica imagen de mujeres y niños cargando sobre su cabeza cántaros repletos de agua mientras caminan kilómetros y kilómetros hasta llegar a sus casas. Y es que la falta de agua corriente en muchas regiones del mundo es un problema con el que sus habitantes se han acostumbrado a vivir, llegando a pasar más del 25% de su día recorriendo largas distancias -en ocasiones de más de 10 kilómetros- para transportar el agua desde el pozo más cercano hasta sus poblaciones.
Pero todo esto puede empezar a cambiar y puede que, poco a poco, comencemos a ver como estos lugareños dejan atrás esta arcaica manera de transportar el agua para dejar paso a una nueva forma, más fácil y sencilla, de llevar este preciado elemento a sus familias, y todo ello gracias a la Waterwheel. Este novedoso invento, cuya traducción literal al español sería “rueda de agua”, consiste en una rueda-bidón con un manillar en la que se almacena el agua para después transportarla rodando sobre el terreno.
Gracias a esta simple idea la Waterwheel permite llevar de una vez hasta 50 litros de agua –entre 3 y cinco veces más que los métodos tradicionales-, rebajando muchísimo el tiempo de transporte y disminuyendo los problemas de salud que conlleva transportar día tras día tantos litros sobre la cabeza. Además, el bidón está fabricado en plástico altamente resistente con un tapón que permite mantener el agua de forma higiénica, reduciendo drásticamente las enfermedades relacionadas con el agua. Por otra parte, el diseño de la waterwheel se asemeja bastante al recipiente utilizado habitualmente para recoger agua en la India, denominado “matka”, por lo que la aceptación de esta nueva herramienta esta siendo aún más alta al aunar tradición y modernidad.
La Waterwheel ha sido patentada por la empresa estadounidense Wello, fundada por la emprendedora social Cynthia Koenig, que ha llevado a cabo este proyecto con el único fin de mejorar la vida de miles de mujeres y niños, principales procuradores de agua en la mayoría de poblaciones de la India. Con la Waterwheel estas personas podrían llegar a evitarse caminar hasta 35 horas a la semana, 5 horas al día que podrían emplear en ir a la escuela, trabajar o pasar más tiempo con su familia o amigos. Además, la Waterwheel está empezando a cambiar la imagen que los hombres tienen de esta tarea, considerada tradicionalmente como trabajo de mujeres, y comienzan a implicarse más en el transporte del agua para sus familias.
Aún a día de hoy el proyecto de la Waterwheel se encuentra en fase piloto y se está implantando poco a poco en algunas comunidades rurales de la India, entrevistando cada cierto tiempo a sus usuarios para saber más sobre su efectividad. La Waterwheel se produce íntegramente en la India y se vende por entre 20 y 30 dólares, un precio bastante alto para este país aunque pretende rebajarse a menos de la mitad cuando termine la fase piloto en la que se encuentra.
Para más información:
Escrito por: Eva del Amo
India, tierra de maharajás y escenario de las Mil y Una Noches, es el país romántico por naturaleza. Por ello muchas personas se decantan por una luna de miel en India o la convierten en parada obligatoria tras un viaje de novios en Sri Lanka o tras pasar una inolvidable luna de miel en Maldivas. Porque India no puede faltar en ningún viaje al subcontinente asiático que tenga al romanticismo como principal aliciente.
Es difícil imaginar un escenario más romántico que el que ofrece el Taj Mahal al atardecer, cuando el mármol blanco adquiere el mismo color que el cielo. El mundo parece detenerse por unos segundos… tiempo suficiente para que surjan esas palabras que llevamos tiempo queriendo decir a nuestra pareja.
El marco no puede ser más espectacular. Las emociones estarán a flor de piel. Es el instante perfecto para pedirle matrimonio y decirle cuánto deseamos una vida en común. Es el momento ideal para recordar ese “sí, quiero” que os disteis unos días antes. Es la ocasión única de decirle que, por mucho que pasen los años, tu amor seguirá intacto. Saca ese anillo que llevas preparado y ponlo en su dedo por primera vez. Observa su cara cuando vea esa joya que has comprado para una ocasión tan especial como ésta.
India está llena de ideas para un viaje romántico: palacios en donde disfrutar de una romántica cena a la luz de las velas y alojamientos con vistas a templos milenarios, donde tomar un cóctel con el sonido de los violines como banda sonora de un momento simplemente perfecto. Ciudades como Udaipur, donde dar un romántico paseo en barco por el lago Pichola, o preciosos monumentos como el Palacio de los Vientos de Jaipur, donde es fácil imaginarse a las mujeres del harén escondidas tímidamente entre el enrejado de sus casi mil ventanas.
Una velada perfecta con una mesa a todo lujo en la copa de un árbol sagrado de Khajuraho, disfrutar de un jacuzzi con vistas mientras la noche se abre paso y miles de estrellas alumbran el cielo. Ver un atardecer de mil colores en una playa de Goa, o recorrer los patios de espejos y salones majestuosos y solicitar una botella de champán en la suite de alguno de los hoteles más lujosos del mundo. Recorrer de la mano los preciosos jardines de un palacio, o susurrar palabras al oído junto a los dioses Vishnu y Krishna. Pasear por un mercadillo y que te coloquen al cuello una guirnalda de flores. India es el gran decorado de película que te invita a declarar tu amor. ¿Vas a desaprovechar tan magnífica oportunidad?
Escrito por: Enric Donate
El viaje a Kerala en familia empieza con los confortables vuelos a Cochín y Trivandrum de Qatar Airways o Emirates. Ambas aerolíneas permiten volar con todo el confort con una parada intermedia que divide el viaje en dos mitades exactas, perfecto para que los más jóvenes de la casa se entretengan con una película y demás servicios de abordo sin agobiarse.
Al llegar nos da la bienvenida la histórica Cochín. La ciudad se dispone en varios islotes frente a la costa donde Vasco de Gama llegó en 1498. Cochín es pura historia de la colonización europea con sus casas de colores y su ambiente bohemio y artístico.
Aquí te sugerimos que te adentres en el espectáculo del kathakali, un teatro ritual indio donde los más pequeños podrán aprender como los gestos y las miradas cuentan los mitos hindúes. En las playas de Cochín se encuentran las famosas redes chinas, unas estructuras en la orilla que permiten pescar sin necesidad de salir a faenar. Toda la familia se divertirá ayudando a levantar estos curiosos artefactos que siguen en uso como hace siglos. Lo que pesquéis se puede cocinar en los chiringuitos de Fort Kochi o si preferís una cena más lujosa, la encontraréis en alguno de los hoteles coloniales de la ciudad.
Saliendo de Cochín es obligado adentrarse en los Ghats Occidentales, la cordillera montañosa que separa Kerala y Tamil Nadu. Aquí Kerala en familia se convierte en un viaje de los sentidos entre paisajes de montaña y bellas plantaciones de té salpicadas por saris de colores. Encontraréis aquí los legendarios jardines de las especias que fascinan a los más pequeños por la variedad de sabores, colores y aromas de las especias que crecen entremezcladas e interdependientes. Munnar y Kumily son las paradas obligadas de esta ruta que termina en el Parque Natural de Periyar donde podréis pasear por las orillas del lago a lomos de un elefante o recorrerlo en barca y aproximaros a los grandes felinos y la fauna tropical del parque nacional más grande de la India.
Al volver a la costa toda la familia puede disfrutar de un relajante crucero fluvial por los Backwaters, una región de canales de agua dulce próxima a Alleppey donde los antiguos barcos de transporte de arroz se han convertido en casas flotantes. Viviréis como un local comiendo con las manos sobre hojas de banano los manjares cocinados a bordo mientras navegáis por las preciosas aldeas rodeadas de campos de arroz.
Un viaje a Kerala en familia debe terminar con unos días de relax en las playas del sur. Kovalam o Varkala son algunos de los enclaves donde encontraréis los mejores tratamientos ayurvédicos y masajes para los más mayores y un amplio abanico de actividades acuáticas y de naturaleza para que los peques disfruten de su primer viaje a India en las costas del Mar Arábigo.